Tras el fin de la dictadura de Anastasio Somoza en los años 70 en Nicaragua, el nuevo gobierno empezó a incluir una nueva campaña de alfabetización, ya que debido a los disturbios civiles que habían dominado Nicaragua durante tantos años, muchos de sus ciudadanos no sabían leer ni escribir, en esta incluyeron, escuelas para personas sordas las cuales antes estaban aisladas, ya que no tenían una lengua de señas estandarizada, sino que se comunicaban con mímicas caseras o señas que utilizaban con sus familiares; Esta campaña se llevó a cabo con el fin que todos los pueblos fuesen territorios libres de analfabetismo.
Para inicios de los años 80 en Managua, la capital de Nicaragua, se reunieron a más de 400 jóvenes de entre 4 y 16 años en 2 escuelas, Escuela Villa Libertad y Escuela Melania Morales con el fin de que se les enseñara un español oral y a aprender a leer los labios para que de esta manera ellos pudieran entender y comunicarse con las personas oyentes, sin embargo, a diferencia de lo que se tenía planeado, esta reunión de tantas personas sordas logró que entre ellos comenzaran a compartir sus propias señas y comunicarse con las señas que utilizaban con sus familiares, con el paso del tiempo la comunicación entre ellos se volvía más fluida y aunque los profesores intentaron aprender dicho lenguaje no tuvieron éxito por lo cual decidieron llamar a investigadores como Judy Kegl (lingüista estadounidense) la cual aunque al principio confiesa que no sabía que querían de ella, después comenzó a estudiar este lenguaje y ver su evolución, ya que era el primer lenguaje del cual se veía su creación y el cual podían documentar desde su nacimiento, lo que también ayudó a los científicos a entender cómo se forma una gramática desde cero y cómo el lenguaje se vincula al desarrollo del pensamiento.
Durante este proceso se dieron cuenta también que eran las personas más pequeñas las que mayormente estaban impulsando la expansión del lenguaje y sus reglas gramaticales y a su vez que eran estos mismos los que empezaron a adoptar modulación espacial y tenían mayor fluidez, esto según los investigadores es porque a medida que envejecemos nuestros instintos lingüísticos tienden a disminuir por lo cual muchas de las personas mayores no estaban generando gramática propia, y se limitaban a copiar la que estaban generando los pequeños.

¿El LSN (Lenguaje de señas Nicaragüense) es igual al ASL (Lengua de Señas Americana)?
La respuesta a esta pregunta es no, ya que, aunque hoy en día hay quizás mayor influencia extranjera, la LSN o ISN es una lengua propia, nativa de Nicaragua, con estructura, gramática y vocabulario únicos sin influencia de otras lenguas, porque si bien, la ASL se extendió en parte de Latinoamérica, debido al aislamiento geopolítico de Nicaragua se impidió de cierto modo la entrada del ASL al país lo cual permitió la creación independiente del Lenguaje de Señas Nicaragüense.
Con el pasar de los años la LSN ha seguido desarrollándose, incorporando nuevas señas, estructuras gramaticales y vocabulario, demostrando la capacidad humana para crear y adaptar el lenguaje continuamente, se continuaron a su vez los estudios sobre la evolución del lenguaje y como este se va enseñando entre generaciones.
En el año 2009, la Asamblea Nacional de Nicaragua aprobó la Ley del Lenguaje de señas Nicaragüense, Ley 675. Ley en la cual se decretaba un reconocimiento del LSN como medio de comunicación oficial de las personas sordas en Nicaragua, requiriendo a su vez que instituciones públicas, ministerios y municipalidades promovieran su uso. Sin embargo, esta ley ha permanecido mayormente simbolica, ya que realmente ha tenido una poca implementación real en medios nacionales esto se puede deber a diversos factores como costos operativos o percepción de baja demanda los cuales han sido motivos de su baja implementación.
A pesar de esto, en el año 2020 el canal Nicaragüense VosTV en alianza con el proyecto Aprendo y Emprendo, la Federación de Asociaciones de Personas con Discapacidad (Feconori) y la Alianza Nacional de Sordos Nicaragua (Ansnic), lanzó un programa televisivo llamado «Mi seña, Tu seña” el cual está dirigido a personas oyentes que necesitan y quieren aprender este lenguaje, a fin de fomentar la comunicación entre las personas sordas y las personas oyentes contribuyendo así mismo para reducir estas barreras comunicativas.

En pocas palabras, el lenguaje de Señas Nicaragüense ha sido y es ejemplo excepcional de cómo un lenguaje puede surgir natural o instintivamente al estar en un grupo de personas que se encuentran en la necesidad de comunicarse, y también su estudio ha sido de gran ayuda para la comprensión de la lingüística y el lenguaje humano.
Les comparto el reportaje que realizó la linguista Judy Kegl para BBC ya que en este está documentado el proceso del nacimiento del Lenguaje de señas Nicaragüense.
Tambien les comparto el canal VosTV donde se encuentran los videos del proyecto “Mi seña, Tu seña”.